Hoy vamos a darnos un homenaje. De esos cargaditos de chocolate. Porque si el chocolate le sienta bien a tu cuerpo, a tu piel también. Mimarnos en casa es muy sencillo, y además podemos conseguir resultados fabulosos. Solo tenemos que mezclar: cacao puro en polvo, miel y agua.
Lo removemos todo bien hasta que obtengamos una textura como la de la foto. Si nos ha quedado muy seca añadimos más agua, y si nos ha quedado muy líquida añadimos más cacao en polvo, ¡así de fácil!
Hacerla sola en casa es genial…
Pero hacerla en compañía, ¡no tiene precio! Sobre todo a los niños, ¡les encanta! Es como jugar a pintacaras, pero inculcándoles desde pequeñitos el autocuidado de una forma divertida. Mi hija Valentina tiene 4 años, y le encanta hacerse sus champús y sus cremas, pero su parte favorita es untarse mascarillas en la cara. ¡Cuánto más llamativo sea el color, mejor!
No se a quién le gusta más el juego, si a la mamá o a la hija.
¡Y además está deliciosa! ¡La pequeñita se la quería comer todo el rato!
Como siempre, te dejo por aquí la receta, por si quieres pinchar sobre la imagen y guardarla en tu dispositivo para tenerla siempre a mano. Y justo debajo el vídeo.
Con amor,
Victoria Moradell